Tres Anuncios por un Crimen – Impresiones

Los delitos están a la orden del día en todas partes. Algunos se resuelven, otros quedan a la espera de las autoridades por diferentes motivos. Pero nada va a detener a Mildred Hayes (Frances McDormand) de encontrar el asesino de su hija en Tres Anuncios por un Crimen (Three Billboards Outside Ebbing, Missouri), un drama-comedia que nos muestra todos los problemas que tienen que pasar los familiares de una víctima ante la indiferencia social y la negligencia autoritaria. Eso sí, esta historia la disfrutaremos con mucha anarquía y humor negro.

¿De qué trata?

Les contaré la sipnosis, y créanme, no es spoiler, es apenas el comienzo de esta alocada película. En un pueblo estadounidense llamado Ebbing de Missouri, Mildred Hayes ha perdido a su hija tras un violento homicidio, el culpable sigue desaparecido. Meses después, la policía continúa sin obtener rastro alguno del asesino. Aquí es cuando Mildred acude a una agencia para colocar tres vallas publicitarias cerca de su pueblo con la idea de llamar la atención a las autoridades, especialmente al jefe de polícia Willoughby (Woody Harrelson), a quien por supuesto no le agrada mucho la idea. Así comienza una hilarante guerra entre Mildred y el mundo para encontrar a los culpables.

Lo Bueno

La película no tiene escrúpulos en mostrar todos los trapos sucios que rodean algunos de estos casos sin resolver. Temas como la negligencia de las autoridades, racismo, ignorancia y la indiferencia son pan de cada día para un pueblo rural como Ebbing. El director Martin McDonagh no titubea ni un segundo con escenas absurdas (pero filmadas con excelencia) que muestran a una Mildred muy molesta con el mundo, cometiendo actos delictivos y respondiendo de forma irreverente a los policías. Es casi como una comedia animada para adultos.

Aquí es cuando los actores brillan de forma magistral. Woody Harrelson como Bill Willoughby es fenomenal, es el actor ideal de un hombre bueno que tiene lidiar con mucho peso en su contra. Al igual que Frances McDormand como Mildred, con una soberbia actuación que muestra a la perfección a una madre y su posible frenesí anárquico, como muy pocas veces he visto en películas. De la misma forma brillan Peter Dinklage y Caleb Landry Jones aportando calidad y humanidad en sus escenas como ciudadanos de este pequeño gran infierno que es Ebbing de Missouri.

Otro aspecto interesante es lograr despistar el ojo del público con un tema central que quizá suponga un detonante para muchos personajes y tenga que ver con el cambio de actitud. Tras una situación tan agobiante, no queda más de otra que actuar, pero quizá de una forma más apropiada. En fin, el climax de la cinta es para dejarte pensando sobre lo que es correcto y lo que no, punto extra para McDonagh.

Lo Malo

Si algo hay que definitivamente no me encaja es su guión. Este es narrado de forma muy conveniente y sobre el papel. Conveniente porque el mundo que rodea a Mildred te lo tiran en la cara de forma muy directa a nivel narrativo pero no tan efectiva en lo visual. Me refiero a que, por ejemplo, el filme necesita que los personajes vociferen que son racistas o psicópatas, pero poco hacen en escena para demostrarlo. Esto incluso logra a confundir al espectador con las decisiones de algunos personajes.

Algunas escenas de comedia y dramas están de más y se vuelven cansadas, con decisiones que la verdad sobrepasan mi entendimiento y que no van a ningún lado. Esto quizá es como la idea que quiere proyectar Martin McDonagh con su discurso anárquico, pero estas no terminan de convencerme. Podría ejemplificar un personaje en particular que promete aportar algo pero que se siente muy forzado y a favor del final de la obra, que si bien deja un buen mensaje, no se siente tan necesario y alarga la película de más.

Veredicto