El género de horror es, junto con el de comedia, uno de los dos géneros más difíciles de plasmar efectivamente en la gran pantalla. Son pocas las ocasiones en las que un cineasta logra mostrarnos algo verdaderamente original e interesante, pero esto es sin duda lo que ha logrado Jordan Peele con Get Out, la cual dirige y escribe.
Chris (Daniel Kaluuya) y su novia Rose (Allison Williams) planean juntos un viaje a la casa de los padres de la misma con el fin de conocerlos luego de unos meses de noviazgo. Chris comienza a sentir una inesperada incertidumbre ante la posibilidad de que sus potenciales suegros no aprueben su relación debido a sus diferencias étnicas.
A pesar de una buena primera impresión, las cosas comienzan a dar un giro para mal poco a poco. La tensión racial y el extraño comportamiento de nuevos invitados comienzan a revelar que no todo es lo que parece en la vida de esta simple familia. Pronto Chris se ve envuelto en una amenazadora y surrealista situación de la cual deberá salir a toda costa.
Leyendo su premisa sin spoilers, Get Out podría sonar como el guión de una comedia. Las situaciones que se dan en la primera mitad de la película, en muchas ocasiones, podrían llegar a verse en series de televisión desde un punto de vista humorístico. Sin embargo, es gracias a su efectiva banda sonora, además de una impecable cinematografía, que Get Out logra crear una atmósfera tensa, llena de misterio y anticipación.
El guión, por su parte, pone como conflicto principal la diferenciación racial de los personajes, dándole un giro inesperado e interesante de horror que se presta para amplia discusión sobre temas de discriminación, idolatría e incluso la concepción moderna de apropiación cultural.
Cada escena y cada diálogo contribuyen a que la trama se desarrolle de una forma bastante orgánica y cohesiva, haciendo que el resultado, en el acto final de la película, se sienta intensamente satisfactorio.
Es difícil encontrar algún aspecto negativo con el guión, puesta en escena o actuaciones en Get Out. Por donde quiera que se le vea, el reparto, cinematografía e historia están excepcionalmente cuidados y logran transmitir en todo momento la singular visión de su director, siempre y cuando se le obvie un ligero caso de ciencia ficción que contribuye al “horror corporal” en el que se centra mucho del conflicto de la película.
El ritmo en el que se desenvuelve la historia puede sentirse un poco lento a veces, y si eres de los que espera una película clásica de horror con sus periódicos sustos sorpresivos o entes sobrenaturales, probablemente saldrás decepcionado.
| Get Out es una de esas películas que entre más piensas en ella, más unes los cabos y más te adentras en sus temáticas, más sale a relucir lo bien logrado de sus elementos. Guión, sonido, actuaciones y temáticas modernas hacen del total mucho más que la suma de sus partes, y es sin duda una recomendación que puedo hacer ampliamente, en especial para los que buscamos nuevas y originales entregas en el género de horror. |
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