4 Razones Por Las Que Tony Stark Es El Villano Del MCU

Un punto que contínuamente es criticado sobre el Universo Cinematográfico de Marvel (MCU) es que sus villanos son la parte más débil de sus películas. Con excepción de Loki, el resto de los antagonistas en las películas de nuestros superhéroes favoritos caen ya sea en la categoría del genérico enemigo que quiere destruir el universo ó el genérico enemigo que quiere destruir al protagonista. Sin embargo, ¿qué tal si hemos tenido al más grande de los villanos frente a nosotros todo el tiempo y no hemos podido verlo por lo que realmente es? Nos referimos, por supuesto, a Tony Stark.

Tony comparte una lista de atributos muy particulares con el resto de villanos clásicos de las películas, como por ejemplo que…

1. Es extremadamente egocéntrico

Tony Stark comienza su trayectoria en el universo cinematográfico de Marvel como el genio magnate a cargo de las industrias Stark, las cuales obtienen sus ganancias mayormente gracias a la venta de armas. Todo cambia en el negocio de la venta de muerte a nivel internacional cuando un día, luego de una demostración armamentista a la que sólo Tony Stark sentiría el impulso de asistir en persona, es capturado por un grupo de extremistas y forzado a crear armas para ellos.

En cautiverio, Tony conoce a otro prisionero llamado Yinsen quien, luego de salvar su vida como un verdadero McGyver de las cavernas, le insta a no ceder a las demandas de los terroristas que los tomaron prisioneros y a construir algo que les ayude a escapar. Tony hace lo que sabe hacer mejor y construye el primer prototipo de lo que se convertiría en su icónica armadura. Varios días después y como parte de un desayuno completo, decide asesinar unas cuantas personas y escapar. Luego, es rescatado por el ejército de los Estados Unidos, quienes probablemente no habían podido dormir pensando en lo que Tony sería capaz de crear sin ellos cerca para vigilarlo.

Como es de esperarse, la traumática experiencia cambió a Tony muy profundamente. Como es de esperarse también, aprendió la lección equivocada: su compañía dejó de producir armas, pero sólo porque decidió convertirse él mismo en una. Bajo su propia lógica tonyana, el mundo es un lugar mejor cuando el único que tiene acceso a las armas es Tony Stark.

En Iron Man 2 vemos cómo el gobierno (que aún con agentes de Hydra infiltrados no deja de tener razón) convoca a Tony a una audiencia con el fin de que comparta su tecnología con el resto del mundo o al menos con el ejército de su país. Su comprensible preocupación es que el arma más versátil del mundo está ahora en manos de un excéntrico asesino inestable con severo estrés post traumático y un completo desdén por la política internacional. Tony se rehúsa a hacerlo ofreciendo básicamente una razón: “Tony Stark”.

Como un avatar viviente del complejo de dios (y buen supervillano), Tony no permite que nadie le diga qué hacer. La únicas personas que parecen tener alguna influencia sobre su gigantesco ego son su asistente/CEO/romance Pepper Potts y James «Rhodey» Rhodes (“Guor Machin”), pero su relación personal con ambos no evita que les termine alienando y lastimando. A pesar de ser sus compañeros de armas y sus únicos defensores ante los ojos del gobierno y del mundo, es de esperarse que ser cercano a alguien Tony no sea fácil ni divertido, especialmente cuando consideramos que…

2. Acostumbra manipular a las personas que lo rodean

¿Para qué son los amigos, no? Ningún genio malvado que se respete está completo si no utiliza a la gente que lo rodea para para sus objetivos, y Tony es un maestro del arte del “hazlos pensar que fue idea de ellos”.

La primera en su lista de víctimas es Pepper Potts quien, como establecimos, es el interés sentimental de Tony a través de casi todas sus películas y le tiene un gran cariño y apreciación. Esto, claro, la convierte en la víctima perfecta para el abuso de confianza y el hábito de tomar decisiones por ella sin preguntar, como la vez que Tony la engañó para que le realizara una operación de corazón para la cual no estaba preparada, pero que de hacerla incorrectamente causaría su muerte.

O la vez que decidió convertirla en CEO de su empresa sin consultarle absolutamente nada, con la excusa de que él mismo no tenía lo necesario para ese rol (pero a la vez quedándose con buen porcentaje de las ganancias para financiar su “hobby”). Podríamos aludir que ese ha sido siempre su tipo de relación y que al final Tony dice algo sincero y siempre terminan bien, pero como la más reciente película de Marvel (Civil War) nos enseñó, esa relación es del tipo “si no termina mal, es porque no ha terminado aún”.

Luego tenemos a Rhodey, quien desde el primer día no estuvo muy de acuerdo con todo el “aironmanismo” de Tony, y siempre le insistió que debía tener algún tipo de control. Basándonos en esto, podemos asumir que lo último que Rhodey quería era ser parte del plan de Tony para convertirse en el primer Iron Man que no corre, nada o monta bicicleta. Desafortunadamente, esto es exactamente lo que se ve moralmente obligado a hacer cuando ve que su amigo no sólo no es responsable con el arma letal que creó, sino que es un peligro para todos a su alrededor.

¿Sorpresa? Improbable. Como bien lo cuestiona Nick Fury en la misma película, es imposible que Tony Stark, genio obsesivo, no haya instalado medidas preventivas de seguridad para sus trajes, sin mencionar a su sistema operativo/sirviente Jarvis. La explicación apunta hacia un lado más maquiavélico: Tony planeó todo con el fin de que uno de sus trajes terminara en manos del gobierno. Uno que no expusiera más que la base del funcionamiento (el traje de Rhodey no tiene armas letales aún, ni a Jarvis) y estuviera en manos de alguien conocido e incluso influenciable, permitiéndole quitarse la presión gubernamental de encima. ¡Y funcionó! De haberlo pedido, probablemente Rhodey se hubiese negado, así que, ¿por qué no usar lo que sabe de su amigo para hacerlo pensar que fue completamente su idea?

Por último tenemos a Bruce Banner, quien probablemente tiene la mente más afín a Tony y con quien logra una química instantánea. Para Avengers: Age of Ultron, no sólo Tony ha convencido a Banner de ayudarle a construir un arma capaz de detener al increíble Hulk, quien constituye su mayor amenaza (bautizada Verónica en una de las más geeks de las referencias), sino que lo presiona y convence no una sino dos veces para crear un sistema de inteligencia artificial que Banner está convencido es mala idea. Un experimento que ya sabemos como termina.

Las costumbres manipuladoras de Tony Stark se manifiestan hasta en su prodigio Ultron, quien se vuelve una encarnación (¿metalización?) pura de este. Ultron utiliza el odio de los Maximoff por Tony contra los vengadores y, aparte de compartir su mismo sentido del humor y amor por las frases sarcásticas, representa una versión de Tony más asertiva y menos cegada por su aparente búsqueda de redención y heroísmo. Ultron es el Tony real sin restricciones, quien a pesar de creer que tiene buenas intenciones (no olvidemos que según él buscaba realmente salvar el mundo) termina poniendo en riesgo a todos, ya que…

3. Todo lo que crea un Stark se usa para la destrucción

Para este, tenemos que hacer la lista:

• En Iron Man, Tony construye por primera vez su traje y lo utiliza para destruir las armas de su compañía que compraron los terroristas. Esto inspira una serie de prototipos que culminan tanto en su famoso traje de Iron Man como en su rival Ironmonger (sí, tenía nombre). Este último termina siendo derrotado gracias al poder destructivo del reactor ARC que, curiosamente, también inventó un Stark.

• En Iron Man 2 el antagonista Ivan “Whiplash” Vanko no sólo es capaz de recrear el reactor ARC (gracias al trabajo de su padre con Howard Stark) y arruinar un hermoso Gran Prix de Monaco, sino que termina tomando el control sobre el traje de War Machine y aterrorizando una convención armamentista completa.

• En Iron Man 3, Extremis y todos los chicos bomba de Ardrich Killian son creados como resultado de una invención de un joven, alcohólico y promiscuo Tony. En el clímax de la película todas estas personas afectadas, que bien pueden estar siendo chantajeadas para no terminar como una bomba humana, son atacadas por sus más de veinte versiones distintas del traje de Iron Man.

• En Age of Ultron, Tony crea al titular Ultron. La “Legión de Hierro” de Tony, la cual creó para ayudar a los civiles en situaciones peligrosas, sirve como primer anfitrión para su malvado primogénito robotico y probablemente inspiración para su posterior ejército metálico. «Verónica» tampoco sale muy bien librada de la mala imagen en la mente de los sudafricanos.

Destrucción y muerte causadas por invenciones Stark rodean a Tony como moscas a… la miel. Hasta la torre Stark, un símbolo fálico que sólo podría ser de su invención, fue utilizada en la primera entrega de Avengers para abrir un portal hacia Nueva York e inicia la invasión chitauri.

El patrón es evidente. En especial para los que se le oponen durante los eventos de Civil War, donde nos queda más que claro que…

4. Vive consumido por culpa y deseo de redención (o venganza)

Lo que convierte a Tony en un villano insidioso e interesante es que, irónicamente, sólo es capaz de pensar en sí mismo y lo que quiere, pero nunca le ha dedicado demasiado tiempo a considerar las consecuencias de sus acciones. Cuando llegamos a Civil War, Tony ya no siente que realmente posea un compás moral claro que le diga qué está bien y qué está mal, por lo que decide relegar esa distinción al gobierno. El mismo gobierno que él sabe ordenó que la invasión chitauri debía ser contenida bombardeando Nueva York completamente y, si recordamos, que podría aún albergar agentes dobles de Hydra que no hayan sido expuestos por los Shield Papers.

Los eventos sucedidos hasta el día de hoy en el universo Marvel han despojado a Tony de su más grande atributo  aún como agente de destrucción encubierto: su iniciativa e independencia. Si sólo hubiese limitado su nuevo punto de vista a sí mismo, no hubiera habido ningún problema, pero como Tony Stark es el único que debe poder tonystarkear en todo el mundo, exige a la demás super gente que se unan a su bando o enfrenten las consecuencias. ¿Cuál es su lógica realmente? ¿Qué pretende lograr, aparte de impedir a todos los superhéroes del mundo ejercer su super heroísmo? La respuesta está en la pregunta. Desmantelar los Vengadores bajo la bandera de responsabilidad es un plan tan sutilmente ejecutado y globalmente malvado que ni siquiera Loki con todas sus artimañas y ajedrez mental hubiera podido idear, porque hasta él siente un poco de amor por los suyos.

Con una cuarta película por anunciarse, Tony continuará buscando redención y en su camino  seguirá causando más daño y más problemas que todos los villanos de Marvel juntos. A este ritmo, lo más probable es que para cuando Thanos llegue a la tierra en Infinity Wars vea en Tony algo tan malvado que le saque una lágrima de orgullo.