Noita – Análisis

Créditos a Conlan Parkman por el arte de la imagen de portada

Los gráficos fotorrealistas generalmente se llevan la atención de las masas, en especial frente a un cambio de generación de consolas. Afortunadamente, los gráficos retro y el arte pixelado mantienen su encanto eterno gracias al ingenio de los desarrolladores modernos. El caso de Noita es uno sobresaliente ya que, además de ofrecer un apartado gráfico muy dinámico, se basa en un motor de físicas que no es nada menos que impresionante.

Juego: Noita
Género: Exploración de Mazmorras (Roguelike), Acción, RPG
Subtítulos: Inglés, español, italiano, francés, alemán
Jugadores: 1 en solitario
Desarrollador: Nolla Games (País: Finlandia)
Distribuidor: Nolla Games
Plataformas y fecha de salida: 15 de Octubre del 2020 para PC vía Steam | GoG | Humble Store | Itch.io
Precio inicial: $19.99 en Steam, Humble Sore e Itch.io, $6.92 en GoG

A lo profundo, y más allá

Luego de una introducción que explica el universo que habitas y tu meta de forma completamente fugaz y abierta a interpretación, inicias tu primer partida. Es probable que en un inicio te confundas. Noita es un juego que explica sus mecánicas mientras lo juegas y, frecuentemente, a punta de muertes inesperadas.

“WTF!” serán casi siempre tus últimas palabras.

Por su naturaleza roguelike, cada vez que inicies un nuevo descenso encontrarás condiciones completamente nuevas. Encarnas un pequeño mago que inicia con dos varitas. Una de ellas siempre tendrá un ataque débil pero infinito. La segunda siempre tendrá un hechizo fuerte y peligroso para ti mismo, pero limitado a tres cargas. Además, contarás con una poción aleatoria que puede ser de gran ayuda si sabes aprovechar.

Tu única instrucción real en el juego es la de descender. Debes encontrar la forma de atravesar oscuras minas llenas de monstruos con poderes inesperados, para así proseguir a la siguiente zona que promete peligros mayores, pero también grandes recompensas.

Oveja voladora, claro ¿por qué no?

Durante tu camino encontrarás más varitas, más pociones y oro. Este último lo obtienes principalmente al eliminar enemigos, pero también es frecuente que haya depósitos al alcance de la mano si cuentas con algún hechizo que te ayude a excavar. Al final de cada nivel (aunque casi podrían llamarse biomas) encontrarás un portal que te llevará a una zona donde podrás comprar varitas aleatorias con el oro obtenido y podrás escoger una de tres mejoras permanentes para tu personaje.

También puedes aprovechar estas zonas entre cada nivel para modificar tus varitas mágicas, moviendo algunos de sus efectos a otras para crear combinaciones que te sirvan mejor. Esta es otra mecánica que es vital y el juego no explica, pero es (aparentemente) su forma de fomentar la curiosidad constante del jugador.

En sí, este ciclo no tiene nada de especial y es esperado en este tipo de juegos. Lo verdaderamente fascinante de Noita es la forma como logra jugar con su motor gráfico para crear situaciones interesantes.

Una maravilla tecnológica

Cada pixel en Noita es simulado, lo cual es una frase simple pero con repercusiones realmente profundas. Los pixeles de tierra, por ejemplo, se comportan como tierra, cayendo y desplazándose según la gravedad les afecte. La vegetación se comporta de forma parecida. Sin embargo, la ecuación comienza a ponerse interesante cuando comenzamos a incluir elementos. El agua, por ejemplo, se mueve para ocupar el recipiente que la sostenga, pero también reacciona con el fuego, evaporándose si este es demasiado o apagándolo en caso contrario. El fuego, por su parte, puede consumir a los enemigos, la madera, el carbón, la pólvora y muchos otros objetos más que son parte de los niveles de Noita, creando a veces reacciones en cadena que pondrán a prueba tu PC.

El ciclo de la vida… y muerte sorpresa.

El metal es resistente al fuego pero transmite electricidad eficazmente. Los enemigos que utilizan fuego son inmunes a este pero débiles ante el agua. Docenas de estas reglas del mundo natural existen implícitamente en Noita y gracias a tus habilidades como mago cada partida es una explosiva combinación de todas ellas. El gran encanto del juego viene de las frecuentes situaciones en las que, para bien o para mal, los elementos a tu alrededor reaccionan para crear mezclas explosivas e interesantes.

Puedes combatir fuego contra fuego, pero el agua es mucho más efectiva.

Aunado a esto, existen muchos estados de tu personaje que son causados por estos elementos y que afectan la jugabilidad. Sumergirte en agua, por ejemplo, te hace resistente al fuego por unos segundos. El ácido afectará tu nivel de vida poco a poco, por lo que deberás usar agua o lodo para neutralizarlo. Existen docenas de estos efectos que entran en juego constantemente con las demás mecánicas, haciendo la experiencia de jugar Noita una cadena constante de sorpresas y experimentos.

Puedes saciar tus llamas con la sangre de tus enemigos, encarnando como nadie el espíritu del metal.

Para concluir, existe también una mecánica que te permite comerte lo que se encuentre cerca de ti. Puedes usarlo para beber agua, sangre o ácido y obtener diferentes efectos también. No arruinaré aquí la sorpresa de probar esta mecánica con todos los elementos que encuentras pero, por suerte, el juego posee un generador de GIFs animados propio. Con este puedes capturar estos momentos donde la curiosidad te gana y decides que quieres ver si ese objeto nuevo que encontraste te da oro o bien explota al dispararle.

Noita - Desbloquables
Y hay muchas, muuuuuuchas cosas por descubrir.

Lo Bueno:

  • Cientos de objetos, hechizos y habilidades le dan una variedad gigante
  • Motor gráfico produce geniales efectos dinámicos entre elementos
  • Jugabilidad fomenta la curiosidad y experimentación

Lo Malo:

  • Un poco demandante técnicamente (aunque no lo parezca)
  • Algunas mecánicas podrían estar mejor explicadas

Conclusión

Noita es una de esas escasas juntas exitosas de innovación técnica, excelencia en diseño y  adictiva jugabilidad. Si te gustan los roguelikes que te dan una gran variedad de opciones y donde hay mucho que explorar y descubrir, no puedes dejarlo pasar por alto.